Cómo exportar un vehículo desde España sin problemas

¿Estás pensando en exportar tu coche? Aquí te mostramos los pasos esenciales para hacerlo de manera sencilla. Primero, asegúrate de tener todos los documentos necesarios, como el Certificado de Conformidad y el permiso de circulación. Luego, realiza la baja temporal en la DGT para que el coche esté listo para salir del país.

Organiza el transporte y verifica que cumples con los requisitos de aduana en el país de destino. Si es necesario, considera contratar un servicio de transporte seguro. También es importante informarte sobre posibles restricciones de importación y seguir buenas prácticas para asegurar una transacción segura. Tener claro cada paso te ayudará a evitar sorpresas y a lograr una exportación exitosa. Aquí te dejamos los pasos a seguir:

1. Documentación necesaria para exportar un vehículo
2. Tramita la baja del vehículo en España
3. Traslada el vehículo al extranjero
4. Recomendaciones y restricciones a tener en cuenta

Si quieres exportar tu coche desde España, necesitarás tener a mano los documentos necesarios. Cada uno cumple una función importante y es fundamental tenerlos todos listos antes de empezar los trámites.

• Identificación del propietario: Para acreditar tu identidad como propietario del coche, deberás presentar un documento oficial. Si eres un particular, puedes usar tu DNI, permiso de conducir español, tarjeta de residencia o pasaporte con el NIE. Si se trata de una empresa, necesitarás la tarjeta de identificación fiscal de la sociedad y la documentación del representante legal.


• Permiso de circulación: Este documento es esencial para la exportación. Necesitarás presentarlo con la baja y el sello de conformidad de la DGT. Durante el proceso, se anula el permiso con una anotación que indica que el coche se destina a exportación.
• Tarjeta de la ITV: La Tarjeta de Inspección Técnica de Vehículos demuestra que el coche ha pasado las inspecciones técnicas necesarias. Esto es especialmente importante si planeas exportarlo fuera de la Unión Europea y tiene más de cuatro años.
• Impuesto de circulación: Asegúrate de que el Impuesto Municipal sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) esté al día. Ten en cuenta que algunos coches pueden estar exentos, como los que tienen más de 25 años.
• Contrato de compraventa: El contrato de compraventa debe incluir:
  • Datos completos del vendedor y comprador
  • Especificaciones del coche (marca, modelo, matrícula)
  • Número de bastidor y kilometraje
  • Precio de venta acordado
  • Fecha y lugar de la transacción
  • Estado del coche y cualquier condición especial
  Es importante que el contrato esté firmado por ambas partes en cada página e incluya una declaración de que el coche está libre de cargas y gravámenes como la resrva de dominio.

Uno de los pasos clave al exportar un coche es realizar correctamente la baja en España. Este trámite asegura que el vehículo esté en regla antes de su traslado al extranjero. Aquí te explicamos cómo hacerlo:

Solicitud de baja definitiva en la DGT

Para dar de baja el coche por exportación, sigue estos pasos:

• Solicita una cita previa en la DGT llamando al 060 o a través de su página web.
• Presenta toda la documentación necesaria en la oficina que te asignen.
• Paga la tasa 4.1 de 8,67 € (gratuita para coches de más de 15 años).
• Espera la resolución de la solicitud.

Anulación del permiso de circulación

Una vez que la DGT apruebe la baja por exportación, se realizará lo siguiente:

• Se añadirá una anotación en el permiso de circulación indicando la exportación.
• Se invalidará el documento para su uso en España.
• El vehículo quedará registrado como «exportado» en la base de datos.

Entrega de documentación al comprador

Después de completar los trámites en la DGT, entrega al nuevo propietario:

• El permiso de circulación con la anotación de exportación.
• La tarjeta de ITV original.
• La documentación que acredite la baja definitiva por exportación.
• El certificado de conformidad europeo (si el destino es un país de la UE).

Una vez completados los trámites de baja, necesitarás decidir cómo trasladar físicamente tu vehículo hasta su destino internacional. Existen diferentes opciones disponibles, cada una con sus propias ventajas según tu situación específica:

• Matriculación temporal con placas verdes: Las matrículas verdes son una solución práctica que te permite conducir legalmente tu vehículo hasta su destino. Este permiso temporal tiene una validez de 60 días, que puede prorrogarse si necesitas más tiempo para completar la matriculación en el país de destino.


• Transporte en grúa u otro medio alternativo: Si prefieres no conducir el vehículo o las circunstancias no lo permiten, puedes optar por diversos medios de transporte profesional. La elección del método más adecuado dependerá de:
  • La distancia entre países.
  • La presencia o no de separación marítima.
  • El tamaño y tipo de vehículo.
  • Tu presupuesto y preferencias personales.

Si preparas bien tu coche antes de exportarlo, reducirás el riesgo de sufrir algún problema y te asegurarás de que el proceso sea fluido. Conocer las restricciones de cada país y cumplir con los requisitos técnicos te ayudará a evitar inconvenientes.

Limpieza y preparación del vehículo

Para facilitar las inspecciones de aduana y garantizar un transporte seguro, es recomendable:

• Hacer una limpieza exterior completa.
• Dejar el interior bien acondicionado.
• Desconectar la batería y vaciar el depósito de combustible.

Limitaciones por antigüedad en algunos países

Antes de iniciar el proceso de exportación, revisa las restricciones de antigüedad del país de destino, ya que varían bastante:

• Argentina y Uruguay: no aceptan vehículos con más de 10 años.
• Chile, Bolivia, República Dominicana y Ecuador: límite máximo de 5 años de antigüedad.
• Colombia y Brasil: no permiten la importación de vehículos usados.

Exportar un vehículo desde España requiere planificación y cuidado en cada paso. Documentos como el permiso de circulación y la baja definitiva en la DGT son esenciales, así como preparar bien el coche y elegir el transporte adecuado para cumplir el plazo de 90 días. Además, conocer las restricciones del país de destino evita problemas; en destinos con normativas estrictas sobre antigüedad o especificaciones técnicas, un asesoramiento profesional puede ser de gran ayuda.

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